Concepción de salud y enfermedad en Teoría Sistémica[editar]

Teoría General de los Sistemas[editar]

Posee tres aspectos principales a destacar:

El Filosófico-epistemológico establece que la naturaleza esta organizada en totalidades que se articulan de manera jerárquica.
El Orden científico plantea que no se pueden entender los fenómenos desde el estudio de sus elementos de modo aislado, es necesario aprehender las relaciones entre ellos.
El Orden técnico es quién da lugar a nuevos conceptos relacionados a las totalidades organizadas; incluye las ideas de organización, complejidad, poder, interacción, información.

Concepto de sistema y características diferenciales entre sistemas abiertos y cerrados[editar]

Un sistema es un complejo de elementos en interacción, donde la modificación de uno de ellos repercutirá sobre el resto. Pueden ser clasificados en dos grandes grupos:

Sistemas abiertos: aquellos que intercambian con el ambiente.
Sistemas cerrados :no se produce dicha interacción.

La familia es un ejemplo de sistema abierto y como tal presentará una serie de características que la diferenciarán de de los sistemas cerrados.

Se trata de una totalidad organizadora en un orden de partes, opera en interacción continua en la cual permanentemente circula información.
Poseen propiedad de equifinalidad: significa partir de orígenes distintos y llegar a fines iguales.
Tienden al orden: tienen entropía negativa, significa más orden, mayor cantidad de información. (Entropía se define como el logaritmo de las probabilidades.)
Tienden al desarrollo, a la heterogeneidad organizada y al orden superior.
Tienen retroalimentación positiva y negativa: mientras que los sistemas cerrados solo cuentan con esta última.

Es válido precisar algunos términos… Retroalimentación negativa: busca que el sistema se mantenga igual, para lograrlo anula cualquier tipo de desviación producida por el ingreso de nueva información. Retroalimentación positiva: (fenómeno inverso) ocurre cuando la información nueva produce cambios.

Propiedades específicas de los sistemas abiertos (Aplicables a la familia)[editar]

Principio de totalidad: implica algo más que la suma de las partes. La interacción es simultánea entre todos los elementos, funcionan de modo global y la totalidad está coherentemente estructurada como entidad propia.
Tienen relaciones circulares: sus miembros están permanentemente en interacción unos con otros. Existe influencia multilateral y no bilateral; lo que es causa también es consecuencia.
Aptitud de homeostasis: es la tendencia de un sistema a permanecer igual a sí mismo. Se sirve de mecanismos de retroalimentación negativa.
Aptitud también para el cambio: es la aptitud que permite cambiar conservándose, pero modificándose para adaptarse a las nuevas condiciones. Hace referencia a mecanismos de retroalimentación positiva.
Poseen límites: tanto internos (entre partes) como externos (con el afuera). Pueden ser rígidos, flexibles o borrosos. Si aplicamos esto a la familia hablamos de límites en el sentido de fronteras que determinan quiénes participan y quiénes no en determinadas interacciones; son reglas y generan roles. Los límites son rígidos cuando existe una tendencia a usar la misma respuesta para distintas demandas; mientras que los flexibles tendrán capacidad de generar diversas respuestas para diferentes demandas. Las demandas pueden venir del propio sistema o de su exterior, requieren modificaciones.
Funcionan en un conjunto dependencia-independencia: hay sistemas familiares donde existe distancia entre sus miembros, la repercusión de la conducta de uno sobre los otros no es inmediata ni masiva, sino lenta y puntual (se denominan “familias desligadas”). Por el contrario existen “familias aglutinadas” que funcionan como una única masa.
El desarrollo se legisla a partir de una determinada distribución de poder: los sistemas no funcionan de modo azaroso, sino que lo hacen a través de legalidad sistémica.

Más allá de la Teoría General de los Sistemas existieron diferentes desarrollos que tuvieron lugar en distintas áreas del conocimiento y contribuyeron a la formación de la terapia familiar sistémica; todos tienen en común el rasgo de centrarse en las relaciones entre partes y totalidades. Como ejemplos de ello observamos varios casos… El surgimiento de la Teoría Matemática de la Comunicación o de la Información (Claude Shannon y Warren), la cual coincide en el tiempo con la Teoría expuesta anteriormente. A finales de la década del 40 otro desarrollo conceptual importante fue el de Nobert Wiener con su idea de “retroalimentación” y “conducta intencional”. En el mismo período Claude Levi-Strauss presenta un trabajo titulado “Las estructuras elementales del parentesco”. Por otra parte Ferdinand de Sassure propone una nueva concepción respecto a la lengua.

Referencias[editar]

Cohen, Jorge (2009). «Salud y Enfermedad, una aproximación desde la Teoría Sistémica». Perspectivas Psicológicas en Salud. Montevideo: Editorial Psicolibros.
Vidal, Raquel. «Conflicto Psíquico y Estructura familiar». Montevideo: Editorial Psicolibros.